Activistas sociales y miembros de la comunidad lésbico-gay de Guadalajara adelantan que en los próximos meses presentarán una iniciativa para impulsar los matrimonios gays en la entidad. Sin embargo, representantes de organizaciones sociales aseguran que aun cuando los integrantes de la LIX Legislatura minimizan el tema, la perredista Olga Araceli Gómez Flores trabaja en esa misma dirección, aunque no se ha puesto en contacto con ellos. Admiten que su trabajo es difícil y dicen que están preparados para la reacción de la Iglesia católica.
Julio Alejandro Ríos/ Revista Proceso/25 de abril del 2010
Las bodas entre personas del mismo sexo formarán parte de la agenda política de Jalisco durante los próximos meses, por lo que la diputada perredista Olga Araceli Gómez Flores y grupos defensores de la diversidad sexual adelantan a Proceso Jalisco que presentarán varias iniciativas de ley en el Congreso local.“Vamos a consensuar.
Tengo la intención de reunirme con el jerarca católico, el cardenal Juan Sandoval Íñiguez… Ellos tienen que entender que la realidad de Jalisco es otra, que es necesario reglamentar estas uniones; no sólo por el aspecto legal, también por los renglones de salud y estabilidad de estas parejas”, comenta Gómez Flores, quien ya prepara el borrador de una Ley de Sociedades de Convivencia para presentarla al pleno de la LIX Legislatura.
Sin embargo, advierte que Jalisco no está preparado para los matrimonios gays. Por ello, dice, se buscará otra alternativa jurídica que garantice que las personas del mismo sexo tengan derechos y obligaciones como los demás, como heredar, en caso de que la pareja no deje testamento, o conseguir créditos conjuntos del Infonavit.“Esta reforma implicaría modificaciones al Código Civil y a otras leyes, como la del Seguro Social. Sé que es un trabajo titánico. Lo estoy ya cabildeando con los demás diputados y espero que haya buena respuesta. No estamos planteando nada de adopciones; no vamos a llegar tan lejos. Pero sí creo que es necesario regularizar a estas parejas”, expone Gómez Flores.
Rodrigo Rincón Jiménez, presidente de Cohesión de Diversidades para la Sustentabilidad, A.C. (Codise), declara en entrevista por separado que “es probable que en junio tengamos lista la propuesta para presentarla por medio de algún diputado”. También advierte: “Estamos preparados para la oleada de ataques”, incluso los de la jerarquía católica.
José Eduardo Rodríguez Pérez, presidente de la Red Universitaria de la Diversidad Sexual, coincide con Rincón Jiménez. Ambos consideran que lo más conveniente es aprobar directamente la boda gay y modificar el artículo 258 del Código Civil de Jalisco, para establecer que un matrimonio entre dos personas puede celebrarse sin especificar el género de los contrayentes.“Pero al paso que vamos, creemos que esto tendría éxito hasta dentro de 10 o 12 años”, reconoce el presidente de Codise, aun cuando la sociedad jalisciense cada vez acepta más las uniones entre personas del mismo sexo: en 2007 el índice era de 13%, hoy se elevó a 18%.
Estudios realizados por Codise indican que 10% de los jaliscienses son homosexuales, asegura Rincón: “Uno de cada 100 jaliscienses vive en una relación de pareja gay o lesbiana bajo el mismo techo. ¡Es una situación que se tiene que regularizar! Y vamos a luchar para que así se haga”.
Lucha en solitario
Las reivindicaciones de género no son nuevas, comenta el activista social. Y relata que en 2006 su organización presentó una iniciativa a través del diputado Enrique Alfaro para crear la Ley Regulatoria del Hogar Común en la entidad. El documento preveía la figura de contratos de convivencia para legalizar las uniones entre homosexuales.
“Y no sólo eso, sino también obtener el reconocimiento jurídico de familias diferentes como, por ejemplo, las integradas por un tío y dos sobrinos. Queremos que se sepa que el esquema de familia puede ser plural y no sólo el convencional; queremos terminar con la discriminación.”
Sin embargo, relata Rincón, las comisiones de Puntos Constitucionales y Derechos Humanos se negaron a debatir sobre el tema y la iniciativa terminó en la congeladora. Hoy, a cuatro años de distancia, activistas sociales están realizando la segunda encuesta estatal sobre diversidad sexual y homofobia y en mayo convocarán al segundo Congreso Estatal contra la Discriminación.
Los resultados de ambas actividades, agrega el activista social, servirán para sustentar los aspectos técnicos de la iniciativa sobre las bodas gays que, insiste Rincón, se presentará en junio.
Sin embargo, el representante de Codise se queja porque, dice, hasta ahora ningún político ha apoyado a las organizaciones que impulsan los cambios en materia de convivencia. Se muestra sorprendido de que la diputada perredista Olga Araceli Gómez Flores esté haciendo una iniciativa por su cuenta.
“Ojalá la presente sólo para lucirse ante los medios; si no se aprueba, no tiene sentido. Es lamentable que lo esté haciendo sin tomarnos en cuenta. A nosotros no nos han recibido ni ella ni (su coordinador) Raúl Vargas. No nos toman siquiera las llamadas ni nos dan cita. Más bien hemos tenido contacto con diputados del PAN. Es una ironía que el PRD sea más conservador aquí”, afirma Rincón.
En contraste, Gómez Flores asegura que ya se reunió con representantes del colectivo Gardenias Tapatías, A.C., así como con algunos sexoservidores de la Plaza del Sol y de Tlaquepaque; además, comenta que ya platicó del tema con su colega Edith González, quien encabeza la Comisión de Diversidad Sexual en el PRD.
“Debemos entender que este fenómeno es natural, se da con pobres, ricos, clase media, católicos, protestantes, políticos del partido X Y y Z. ¡En todos hay gays! Sería ilógico que por ser políticos no sean gays! De hecho los hay en cada familia o salón de clase, es parte de la convivencia cotidiana conocer y convivir con gente de toda orientación sexual y no tiene por qué ser discriminatorio.
“No podemos taparnos los ojos y los oídos ante esta situación. Siempre ha existido y seguirá existiendo. Y aunque se sabe de su moralismo extremo, el gobernador (Emilio González Márquez) debe tener una visión como representante de la ciudadanía. Él debe ceñirse también a las peticiones de las mayorías y las minorías.”
Necesidad y discriminación
La diputada panista Margarita Licea González, quien preside la Comisión de Equidad y Género en la LIX Legislatura, explica que si bien el tema de la convivencia de parejas de un mismo sexo aún no está en su agenda, ella está dispuesta a analizarlo.
Licea González ya tuvo contacto con grupos de homosexuales, pero no abordó ese aspecto. “Más bien platicamos sobre la discriminación que ellos sienten. Pero aún nadie nos ha venido a solicitar que se incluya ese tema en la agenda legislativa. Pero si es un problema social, por supuesto que vamos a estar atendiéndolo”.
–¿Usted qué opina sobre este asunto?
–Es un tema que respeto y como legisladora hay que atender las demandas ciudadanas. Pero debemos ser honestos: en Jalisco ese fenómeno es micro, pero hay que atender a la persona… Sé que está en marcha (una iniciativa sobre las bodas gays) y si es una necesidad social, hay que atenderla, como cualquier otra. No la descarto.
Para Rodrigo Rincón, decir que no se legisla sobre ese asunto porque “no es prioridad” es una salida fácil. Y critica a los diputados porque, arguye, “no dan argumentos ni jurídicos ni científicos para rebatirnos”. E insiste: “Cada vez son más las parejas gay que viven en el mismo hogar, urge reglamentar esa situación”.
El activista adelanta que la iniciativa que presentarán Codise y otras organizaciones defensoras de la convivencia entre parejas de un solo sexo incluirá un apartado en el cual insistirán en que se tipifique la discriminación como delito.
“Y no nos limitamos sólo al tema de la comunidad lésbico-gay, sino también de grupos vulnerables, como los indígenas, las tribus urbanas, los campesinos, los discapacitados”, enfatiza Rincón.
El propósito de la iniciativa es crear la Ley de Fomento a la Inclusión; “todo va enfocado a terminar con la discriminación”. Lo que pretendemos, reitera, es que sea benéfico para todos. Para empresarios, por ejemplo. “Sería positivo que le condonaran los impuestos a quien contrate a gays o gente de grupos vulnerables. Y vendrán más propuestas de este tipo”.
José Eduardo Rodríguez secunda a Rincón. Y agrega: Es fundamental sensibilizar a la gente, hacerle entender que los homosexuales son seres humanos con los mismos derechos.
“Creemos que los discursos son aburridos, por eso preferimos organizar ciclos de cine y utilizar medios de información alternativos para llevarles información a las calles, las universidades. Estamos trabajando para derrumbar esas murallas de prejuicios y falsas etiquetas. Hoy trabajamos en tres centros universitarios de la UdeG”, expone Rodríguez.
No obstante, admite que Jalisco está muy atrasado en la cultura de respeto a los derechos homosexuales, pese a que, dice, “Guadalajara se está convirtiendo en un bastión gay”. Y relata que muchos gays del interior del estado se vienen para acá debido al rechazo cotidiano en sus comunidades. Por desgracia, aquí también hay hechos lamentables por homofobia, pero la gente no denuncia y esto dificulta erradicar la discriminación, lamenta el representante de la Red Universitaria de la Diversidad Sexual.
Y menciona algunos ejemplos: el asesinato, en 2007, de un gay en Jocotepec. Sus verdugos le desgarraron las entrañas con un palo introducido por el ano; el asesinato del transexual Guillermo Luna Pérez, mejor conocido como Lucrecia, muerto a tiros en la colonia Arenales Tapatíos. Activistas locales sostienen que se trató de un crimen homofóbico.
A Rodríguez le sorprenden la ignorancia de las autoridades en esta materia, pero sobre la intolerancia. El presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Jalisco, Felipe Álvarez Cibrián, por ejemplo, declaró que no puede defender derechos de gays porque “no existen en ningún código o ley”. El ombudsman, dice el activista, “no tiene sentido común”.
Lo peor de todo es que la discriminación crece. Recientemente la prensa estatal informó que el IMSS negó el registro a una pareja gay que se casó en el Distrito Federal el pasado 21 de marzo. En entrevista con Proceso Jalisco, Genaro Martínez, uno de los cónyuges, asegura que él y su pareja sólo esperan que las autoridades locales les entreguen la negativa por escrito para promover un amparo.
Con excepción de David Razú, diputado federal por el PSD, nadie se ha preocupado por su caso, dice Genaro. Los demás políticos sólo declaran que “nos van a ayudar”, pero no hacen nada. “Estamos conscientes de que si conseguimos el registro será un hecho histórico. Vamos a lograrlo con armas legales”, revela Genaro.
Rodrigo Rincón, presidente de Coside, remata: “En 2003 hubo una campaña muy fuerte contra la comunidad gay. Y aunque de dos años para acá disminuyó, luego de los escándalos de pederastia, no deja de haber embates. El miércoles 28, por ejemplo, habrá una charla en el templo de San Bernardo titulada Los peligros de la homosexualidad. Y eso es preocupante”.
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