- "se respira el mismo clima pesado de la víspera del nazifascismo, cuando los gays eran atacados, insultados y golpeados por escuadrones; urge una movilización para rechazar este clima de violencia" advierte la ex diputada transgénero Vladimir Luxuria.
Agrupaciones como Arcigay han exigido al gobierno Italiano detenga la creciente ola de ataques del que han sido victimas integrantes de la comunidad LGBT de ese pais.
Septiembre.
La madrugada del 26 de Agosto la discoteca “Qube”, uno de los locales de ambiente más populares de Roma, fue atacada e incendiada. Por fortuna la rápida respuesta del cuerpo de bomberos impidió que el lugar fuera consumido por las llamas. No se registraron heridos ya que el lugar se encontraba cerrado sin embargo el ataque despertó preocupación entre la comunidad gay de Roma, ya que se produjo apenas unas horas después del arresto de Alessandro Sardelli, un hombre acusado de agredir a una pareja gay una semana antes.
Pese a que Sardeli apuñaló y dejó gravemente herido a una de sus victimas el fiscal, en un primer momento le concedió la libertad bajo caución, pero luego de la intervención del alcalde de Roma, Gianni Alemanno que protestó sobre la decisión, el magistrado ordenó el encarcelamiento preventivo.
El creciente temor de las organizaciones gay de que se estaba viviendo una nueva ola de ataques homofóbicos se vió confirmada cuando en esa misma semana una pareja de homosexuales fue perseguida y apaleada en la ciudad de Rímini, 150 kilómetros al norte de la capital.
El 3 de septiembre la comunidad Gay italiana entró en pánico luego de que cuatro individuos irrumpieran en la calle San Giovanni, un punto de encuentro habitual para los gays romanos y lanzaran petardos contra un bar gay de la zona dejando un herido. Según los medios italianos, los autores del atentado fueron cuatro hombres con aspecto “skinhead”. Franco Grillini, presidente del grupo Gaynet, sostuvo entonces ante medios de comunicación que la ola de violencia "son obra de fanáticos y grupos neonazis que se sienten legitimados con la victoria de la derecha en las últimas elecciones políticas".
Tan solo unas horas mas tarde después del pronunciamiento el cantante gay Emilio Reza fue perseguido y brutalmente golpeado, la misma suerte corrieron una pareja de homosexuales en la ciudad de Nápoles.
Pese a la creciente ola de ataques y la conmoción que estos estaban causando en la comunidad LGBT italiana, el gobierno se negó a pronunciarse al respecto. La noche del 4 de septiembre cientos de personas de todo el país se congregaron a las afueras del coliseo y marcharon rumbo al capitolio en Roma para denunciar el creciente clima de hostilidad hacia gays y lesbianas que estaba viviendo el pais.
Los manifestantes exigieron al gobierno que diera una respuesta fuerte e inmediata al creciente clima de intolerancia homófoba que se estaba registrando en todo el pais
Sin embargo, el gobierno no dio la respuesta que se le solicitó y esa misma noche, a tan solo unas horas de haber concluido la marcha se registró un nuevo ataque contra un joven homosexual que salía de un local de ambiente en Florencia. La severa paliza que recibió el joven lo llevó al hospital con lesiones severas.
El 15 de septiembre el gobierno presionado por decenas de agrupaciones gay de todo el mundo presentó a dos detenidos responsables del ataque en Florencia. Sin embargo, la detención no redujo la ola de violencia y tan solo dos días mas tarde, El 19 de septiembre la discoteca Qube fue atacada nuevamente con una bomba molotov. El suceso provocó un incendio de pequeña magnitud que alertó a los vecinos. Pese a que no hubo lesionados, el mensaje era bastante claro. A este ataque su sumaron numerosos reportes de agresiones en todo el país contra homosexuales entre los cuales destacan las brutales palizas que recibieron dos turistas homosexuales, uno armenio y otro sueco en el sur de Italia.
La ola de violencia que vive el pais Europeo comenzó desde abril cuando en la ciudad de Milán un grupo de jóvenes irrumpieron en el bar Toilet Club y golparon a varios asistentes, entre ellos el encargado del local Luca Chiappa.
El ataque coincide con un encuentro de grupos europeos de ultraderecha organizado por la asociación radical Forza Nuova, de ideología fascista y que pudieron sesionar sin problema ya que contaban con el permiso de la junta de Milán y el gobierno Italiano. Desde entonces los ataques contra la comunidad LGBT italiana no han cesado y es en este mes de septiembre cuando se han multiplicado.
red Universitaria LGTH
Agrupaciones como Arcigay han exigido al gobierno Italiano detenga la creciente ola de ataques del que han sido victimas integrantes de la comunidad LGBT de ese pais.
Septiembre.
La madrugada del 26 de Agosto la discoteca “Qube”, uno de los locales de ambiente más populares de Roma, fue atacada e incendiada. Por fortuna la rápida respuesta del cuerpo de bomberos impidió que el lugar fuera consumido por las llamas. No se registraron heridos ya que el lugar se encontraba cerrado sin embargo el ataque despertó preocupación entre la comunidad gay de Roma, ya que se produjo apenas unas horas después del arresto de Alessandro Sardelli, un hombre acusado de agredir a una pareja gay una semana antes.
Pese a que Sardeli apuñaló y dejó gravemente herido a una de sus victimas el fiscal, en un primer momento le concedió la libertad bajo caución, pero luego de la intervención del alcalde de Roma, Gianni Alemanno que protestó sobre la decisión, el magistrado ordenó el encarcelamiento preventivo.
El creciente temor de las organizaciones gay de que se estaba viviendo una nueva ola de ataques homofóbicos se vió confirmada cuando en esa misma semana una pareja de homosexuales fue perseguida y apaleada en la ciudad de Rímini, 150 kilómetros al norte de la capital.
El 3 de septiembre la comunidad Gay italiana entró en pánico luego de que cuatro individuos irrumpieran en la calle San Giovanni, un punto de encuentro habitual para los gays romanos y lanzaran petardos contra un bar gay de la zona dejando un herido. Según los medios italianos, los autores del atentado fueron cuatro hombres con aspecto “skinhead”. Franco Grillini, presidente del grupo Gaynet, sostuvo entonces ante medios de comunicación que la ola de violencia "son obra de fanáticos y grupos neonazis que se sienten legitimados con la victoria de la derecha en las últimas elecciones políticas".
Tan solo unas horas mas tarde después del pronunciamiento el cantante gay Emilio Reza fue perseguido y brutalmente golpeado, la misma suerte corrieron una pareja de homosexuales en la ciudad de Nápoles.
Pese a la creciente ola de ataques y la conmoción que estos estaban causando en la comunidad LGBT italiana, el gobierno se negó a pronunciarse al respecto. La noche del 4 de septiembre cientos de personas de todo el país se congregaron a las afueras del coliseo y marcharon rumbo al capitolio en Roma para denunciar el creciente clima de hostilidad hacia gays y lesbianas que estaba viviendo el pais.
Los manifestantes exigieron al gobierno que diera una respuesta fuerte e inmediata al creciente clima de intolerancia homófoba que se estaba registrando en todo el pais
Sin embargo, el gobierno no dio la respuesta que se le solicitó y esa misma noche, a tan solo unas horas de haber concluido la marcha se registró un nuevo ataque contra un joven homosexual que salía de un local de ambiente en Florencia. La severa paliza que recibió el joven lo llevó al hospital con lesiones severas.
El 15 de septiembre el gobierno presionado por decenas de agrupaciones gay de todo el mundo presentó a dos detenidos responsables del ataque en Florencia. Sin embargo, la detención no redujo la ola de violencia y tan solo dos días mas tarde, El 19 de septiembre la discoteca Qube fue atacada nuevamente con una bomba molotov. El suceso provocó un incendio de pequeña magnitud que alertó a los vecinos. Pese a que no hubo lesionados, el mensaje era bastante claro. A este ataque su sumaron numerosos reportes de agresiones en todo el país contra homosexuales entre los cuales destacan las brutales palizas que recibieron dos turistas homosexuales, uno armenio y otro sueco en el sur de Italia.
La ola de violencia que vive el pais Europeo comenzó desde abril cuando en la ciudad de Milán un grupo de jóvenes irrumpieron en el bar Toilet Club y golparon a varios asistentes, entre ellos el encargado del local Luca Chiappa.
El ataque coincide con un encuentro de grupos europeos de ultraderecha organizado por la asociación radical Forza Nuova, de ideología fascista y que pudieron sesionar sin problema ya que contaban con el permiso de la junta de Milán y el gobierno Italiano. Desde entonces los ataques contra la comunidad LGBT italiana no han cesado y es en este mes de septiembre cuando se han multiplicado.
red Universitaria LGTH
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