¿Te han discriminado alguna vez?

EDITORIAL

Octubre-09

HETEROSEXUALES VICTIMAS DE LA HOMOFOBIA
Todos los días, en todo el mundo cientos de homosexuales se casan con personas del otro sexo con el fin de negar su inclinación erótico-sentimental por personas del mismo sexo.

Pero como el ser humano no esta diseñado para la mentira a largo plazo, tarde o temprano este tipo de relaciones de pareja entre homosexuales y heterosexuales fracasarán inminentemente dado que el homosexual se dará cuenta que su homosexualidad no ha terminado al casarse y el heterosexual abrirá los ojos lo suficiente como para darse cuenta que es imposible intentar sostener una relación de pareja cuando la atracción erótico-sentimental es imposible (al menos por uno de los dos que integran la pareja).

Sin embargo, el fin de un matrimonio entre un homosexual y un heterosexual no es tan fácil, en su camino arrastra inminentemente a ambos a sentimientos de enojo, tristeza y frustración. Ahora resulta que el matrimonio era todo un engaño de una persona que tenia tanto miedo a salir del armario que terminó utilizando a otra persona para intentar no vivir bajo ese temor.

Cuando se llevan a cabo este tipo de matrimonios del “miedo” las personas heterosexuales se convierten en potenciales victimas de la homofóbia ya que si vivieran en una sociedad más tolerante a la diversidad sexual, un homosexual no se habría casado con alguien a quien no ama solo para ocultar su miedo. Si no hubiera homofóbia este tipo de relaciones donde los heterosexuales son utilizados “para taparle el ojo al macho” de su pareja homosexual simplemente no existirían.

Nuestra labor entonces es mucho mas clara de lo que se llegado a creer, nuestra labor consiste en crear las condiciones para que todas las personas vivan plenamente su vida erótica y sentimental, libres de engaños, mentiras y prejuicios. Porque al crear condiciones para que los seres humanos sean libres para ejercer su sexualidad también estamos creando el posible camino de la plenitud y la autentica felicidad.

Demos fin pues a la sobrevivencia del armario y comencemos a vivir, realmente a vivir.
El llamado es este: Heterosexuales y homosexuales, trabajemos juntos para dar fin a las múltiples manifestaciones de la homofóbia.

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